lunes, 26 de febrero de 2018

SI DIOS QUIERE--Se Dio vuole

Año: 2015
País: Italia
Dirección: Edoardo Maria Falcone
Intérpretes: Marco Giallini, Alessandro Gassman, Laura Morante, Ilaria Spada, Edoardo Pesce, Enrico Oetiker, Carlo Luca de Ruggieri, Giuseppina Cervizzi
Guión: Edoardo Maria Falcone, Marco Martani
Música: Carlo Virzi
Fotografía: Tommaso Borg

Tommasso es un cardiólogo respetado y hombre de firmes creencias, ateo y liberal. Está casado con Carla, ama de casa y madre de dos hijos. La mayor, Bianca, parece no tener intereses ni pasiones, mientras que el pequeño, Andrea, es un estudiante brillante de medicina, dispuesto a seguir los pasos de su padre. Pero Andrea tiene algo importante que comunicar a la familia.

Comedia sólida e inteligente, llena de gags en algunos casos desternillantes, pero que invita a reflexionar. La película gira sobre cuatro ejes: la tolerancia, la trascendencia, la familia y la amistad. Ninguno de los cuatros ejes están forzados, sino que fluyen por la película con toda naturalidad,

Tomasso se dice hombre liberal y tolerante. Y, sin embargo, cuando su hijo le dice que quiere ser sacerdote, no lo acepta en lo más mínimo. Es tolerante...según para que. La película te habla de tener apertura de mente y de respeto a todas las posiciones de los demás, aunque parezcan absurdas. Tomasso cambiará, porque cambiará su corazón al encontrarse con la trascendencia.

El segundo eje es Dios. Con naturalidad, sin grandilocuencia, la película transmite un claro mensaje de apertura a la trascendencia, que mueve el corazón del cardiólogo y le hace pensar si está comportándose bien con su hijo y con su familia. Y, al final, el cardiólogo, ateo, apela al milagro.

El tercer eje es la familia. Tomasso tiene descuidado a su mujer y desprecia a su hija mayor y a su yerno. Ese cambio del corazón va significar volver a preocuparse de su mujer y a pedir perdón a su hija y a  su yerno (sin palabras, mediante un abrazo). El Tomasso que se cree superior a los demás, se dará cuenta que es tonto, por sentirse superior a su  familia. Lógicamente, hasta que no cambia, su familia le dejará de lado. 

Sabrá, además, tener consideración por su equipo de colaboradores, a quienes maltrata con su superioridad, con sus palabras y sus hechos.

Por último, la película es un canto a la amistad. Precisamente, el cambio de Tomasso se producirá por su amistad con un sacerdote. Este predicará con las palabras, pero sobre todo con los hechos, que es lo que de verdad manifiesta la coherencia de una religión. A través de esta amistad, el protagonista se abrirá a Dios y al cambio del corazón, lo que le llevará a cambiar su actitud hacia los demás.


lunes, 5 de febrero de 2018

MI "PERFECTA" HERMANA-Min lilla syster

Año: 2015
Países: Alemania, Suecia
Dirección: Sanna Lenken
Intérpretes: Rebecka Josephson, Amy Diamond, Henrik Norlén, Annika Hallin, Maxim Mehmet, Emelie Strömberg, Ellen Lindbom, Karin de Frumerie, Hugo Wijk
Guión: Sanna Lenken
Música: Per Störby Jutbring
Fotografía: Moritz Schultheib

Stella es una chica a punto de entrar en el mundo de la adolescencia. Vive a la sombra de su hermana mayor Katja, una talentosa patinadora a la que sus padres adoran.

A la hora de hablar de temas como la anorexia o la bulimia es necesario no caer en el error de pensar que son trastornos fácilmente tratables, como desgraciadamente muchas veces hemos tenido ocasión de escuchar. Al tratarse de problemas sicológicos y no físicos, es frecuente que cierta gente considere que no hay base médica o incluso que son un cuento chino, cuando la realidad está bien lejos de semejante enfoque, ya que pueden poner en serio peligro la vida de la persona. Además, si estas alteraciones de la conducta alimenticia están desencadenadas por la exigencia de la práctica deportiva, el problema es aún mayor.

Algo así es lo que le sucede a Katja, una joven sueca que está entrenando duramente para seguir mejorando en aquello que se le da mejor: el patinaje artístico. Su familia la adora, su hermana Stella la idolatra, su entrenador la respeta profundamente y ninguno de ellos le insufla una especial presión. Sin embargo, Katja sabe que el patinaje es su vida y tiene que continuar con su progresión, para lo cual toma la errónea decisión de alterar su régimen de comidas. La bulimia se apodera de su día a día y provoca serios contratiempos a su salud que sólo su querida hermana alcanzará a conocer realmente. 

Al mismo tiempo, la película muestra como la situación afecta a la familia, especialmente a los padres, que no saben cómo tratar ese trastorno. Al principio, lo consideran algo menor hasta que efectivamente son conscientes de que están ante un problema médico. Y un problema médico terrible y devastador, porque la anorexia es una de las adicciones más contumaces y tremendas  que hay. Pero, mientras tanto, los dos cónyuges se echan la culpa el uno al otro, sin darse cuenta que fue Katja la que inició su problema. Pero, como se ve bien en la película, la convivencia familiar sufre:los padres por la hija y por su incapacidad de entender lo que está sucediendo; y la hija por los padres, incapaz de superar su trastorno. Al final, la solución será internar a Katja en un establecimiento adecuado -no hay final feliz en esta película- y confiar en que pueda ser curada, cosa nada fácil en este trastorno, ya que es de difícil tratamiento. Sin embargo, a partir del momento en que los padres ya están convencidos de que su hija necesita tratamiento médico, el apoyo que le van a prestar va  a ser total. Y es que también hay que destacar, y es duro, que el amor que tienen los padres por Katja no ayuda en nada a aliviar su situación.

A destacar también de la película el perfecto tratamiento que hace la directora de las relaciones fraternales, en las que pueden producirse roces que parecen insalvables, pero que en seguida con un poco de esfuerzo dan paso a la comprensión y al regreso al cariño. Probablemente, lo mejor de la película es como nos muestra los deliciosos momentos entre las dos hermanas.

En definitiva, el film es un retrato íntimo de familia, sobre todo de relaciones fraternales y paterno filiales en torno a un conflicto desapercibido y que hace saltar por los aires la perfecta convivencia y situación de una familia sueca acomodada.