lunes, 30 de mayo de 2016

MIENTRAS SEAMOS JOVENES-While We`re Young

Año: 2014
País: EEUU
Dirección: Noah Baumbach
Intérpretes: Naomi Watts, Amanda Seyfried, Ben Stiller, Adam Driver, Brady Corbet, Charles Grodin, Maria Dizzia, James Saito, Dree Hemingway, Greta Lee
Guión: Noah Baumbach
Fotografía: Sam Levy

Josh y Cornelia Srebnick, una pareja felizmente casada de creativos de mediana edad de Nueva York, con una vida un poco monótona y que han renunciado a la paternidad, conocen dos jóvenes "hipster", Jamie y Darby, amantes del vinilo y de la máquina de escribir y se sienten fascinados por ellos y por lo que aparentemente representan.

Comedia algo irregular y que tiene algunas cosas interesantes, aparte de hablarnos del mundo de los "hipster". El matrimonio de protagonistas parece que no han salido del mundo de Peter Pan por esa resistencia que presentan a asumir la edad  y a asumir responsabilidades.

Hay dos frases que reflejan muy bien ésto: "La cuestión es que tenemos libertad. Lo que hagamos con ella no es importante". Y la otra es, pronunciada por Josh: "Tengo 44 años y hay cosas que nunca haré". No es posible una libertad vacía, sin compromisos. Lleva a la frustración. La libertad conduce a los compromisos y será más valiosa cuanto más valiosos sean esos compromisos. Eso es madurez. En este caso, parece que el matrimonio se decide a tener hijos a través de la adopción.

Y hay que asumir la edad. Eso también es madurez. Tengo 44 años y ésto es lo que hay, podría decir Josh, con un encogimiento de hombros. ¿Y que es lo que hay?. Un matrimonio ya de años, donde el primer sentimentalismo ya ha pasado, pero hay unos rescoldos que hay que alimentar continuamente. Es la edad de la pasión tranquila. Hay un trabajo, más o menos bueno, donde siempre se puede mejorar. Y nunca mirar hacia atrás, como hace la pareja protagonista. ¿Para qué?. ¿Para hacer el tonto?. ¿Para llenarse de nostalgia absurda: lo que pudo ser y no fue?. Hay que mirar el presente, que es lo único real: esta mujer o este marido, este trabajo, esta familia, estas circunstancias, estos achaques...Y en cuanto al futuro, éste ya vendrá.

lunes, 16 de mayo de 2016

LA CASA DEL TEJADO ROJO-Chiisai ouchi

Año: 2014
País: Japón
Dirección: Yoji Yamada
Intérpretes: Haru Kuroki, Takako Matsu, Hidetaka Yoshioka, Chieko Baisho, Satoshi Tsumabuki, Takataro Kataoka, Yukijiro Hotaru, Yui Natsukawa, Kazuko Yoshiyuki, Shigeru Muroi
Argumento: Kyoko Nakajima (novela)
Guión: Yoji Yamada, Emiko Hiramatsu
Música:Joe Hisaishi
Fotografía: Masashi Chikamori

Después de la muerte de Taki, su sobrino Takeshi descubre un cuaderno de memorias escrito por la anciana. Así aprende que, de joven, trabajó como criada para los Hirai en una casita con un tejado rojo en Tokio. Misaki Hirai es el padre de familia y director del departamento de juguetes de una fábrica. Mientras sueña con la expansión de la empresa, su esposa Tokiko se enamora de Shoji, al que visita en secreto.

Da siempre alegría volver a ver cine clásico, muy semejante a aquel John Ford para el que la escena era lo de menos y lo que contaba era los movimientos y actitudes de los personajes. Con su película, Yoji Yamada viene a ilustrarnos una mentalidad y un modo de entender la familia y el matrimonio que murieron con Taki.

El veterano director mantiene su interés por todo lo relacionado con la familia y vuelve a mirar al corazón de sus protagonistas para mostrar sus inquietudes con discreción y de manera sutil. Vemos el decoro y lealtad de unos y otros, pero también sus inclinaciones y conciencia de culpa...que Taki arrastrará hasta sus últimos días. Pero la elegancia y finura para abrir el alma de cada uno hace que nos acerquemos a ellos con pudor, sin juicios recriminatorios, comprendiéndoles e incluso disculpándoles. Yamada hace que los planos respiren humanismo, que los personajes nos transmitan una manera de pensar en que el servicio, la disciplina o el patriotismo se sitúan en primera línea. También acierta al introducir a Takeshi y a su novia para mostrar la evolución de la sociedad japonesa hacia la modernidad..siempre manteniendo una hondura y un sentimiento a prueba de bombas, con un respeto a los mayores que hasta resulta sorprendente.

En sus quehaceres, Taki manifiesta tanta abnegación como bondad y fortaleza. A su modo, vela por la felicidad de la familia y es algo más que una criada. Es la guardiana de la casa del tejado rojo, la que ha vivido tanto como para poder contar lo que se cocinaba en ella, y para hacerlo de manera velada. El rostro de Haru Kuroi -premio a la mejor actriz en el Festival de Berlín- transmite esa delicadez y fragilidad, esa duda y discreción tan juvenil como refinada; mientras que el de Takako Matsu como joven esposa encierra honestidad y a la vez debilidad. Asistimos a una historia de amor y a otra de infidelidad, a una de amistad y a otra de lealtad. Todo sucede a fuego lento, con la pausa y nostalgia que permiten a la memoria paladear aquellos maravillosos y difíciles años. Contemplación con hermosos planos que hablan de quietud, silencios para reflejar lo incierto de una guerra que aparecía en el horizonte, y colorido para enriquecer una mentalidad que comenzaba a estar trasnochada.


lunes, 2 de mayo de 2016

TIERRAS DE PENUMBRA-Shadowlands

Año: 1993
País: Reino Unido
Dirección: Richard Attenborough
Intérpretes: Anthony Hopkins, Debra Winger, Joseph Mazzello, Edward Hardwicke, John Wood, James Frain, Julian Fellowes, Peter Firth, Roger Ashton-Griffiths
Argumento: William Nicholson (Obra teatral)
Guión: William Nicholson
Música: George Fenton
Fotografía: Roger Pratt

Nos cuenta la película la historia de C.S. Lewis y de Joy Gresham, escritora norteamericana que desea conocerle junto con su hijo. Básicamente fundamentada en hechos reales, aunque con diversas licencias históricas

Es claro que ésta es una de esas películas que hay que ver, aunque no tenga los efectos especiales de la "Guerra de las Galaxias", ya sea en su versión nostálgica-década de los 70-, ya sea en en su versión actual-hoy-.

C.S. Lewis es uno de los grandes escritores ingleses -no es solamente el autor de "Las Crónicas de Narnia, relato aparentemente infantil, pero que, a la vez, en algunos de sus cuentos, es la historia de la Creación, Redención y Juicio Final-, cuyos libros han servido para que muchas personas reflexionen sobre los fundamentos del cristianismo.

Pero, según nos cuenta la película, no era más que un profesor solterón de Oxford, encerrado muy cómodamente en su torre de marfil, buena persona y teórico del dolor. Hasta que conoció a Joy Gresham y se terminó enamorando de ella. Y ese amor le transformó: pasó a ser una persona alegre, pensando en su mujer y en los demás, olvidado de sí.

Pero también conoce el dolor, en la enfermedad de su mujer. Y ese dolor, que le produce conatos de rebeldía frente a Dios, como nos pasaría a todos, le purifica y, frente a lo que se podría pensar, le va a acercar más a El. Primero , porque su matrimonio se convertirá en un matrimonio en el que Dios es el Tercero. Segundo, porque será muy consciente que el dolor es instrumento de purificación: "El sufrimiento es el cincel que usa Dios para perfeccionarnos"

Hay además, en la película, alguna descripción del amor humano sencillamente magnífica: "Con mi cuerpo te adoro, con mis bienes terrenales te doto". Es difícil decir en pocas palabras cómo Dios se manifiesta a través de la  relación conyugal, física,pero a la vez, instrumento de salvación.